Durante la redución de plantilla,
algunos compañeros fueron despedidos y, como venganza hacia la
emisora y los que quedamos, algunos "compañeros" difundieron que la emisora emitia radiaciones
peligrosas para los veraneantes (no para trabajadores que habíamos sido
compañeros, así como el hecho de que mientras trabajaban, no debia importar). El ayuntamiento de Pals midió las
radiaciones por si encontraba algo con que forzar su cierre, tal como dice el
texto. Que "lástima"    
que
no encontró nada.
|